El Gobierno ha autorizado el uso de las mascarillas transparentes para facilitar la comunicación a las personas sordas.

Y es que la mascarilla se ha convertido en un complemento imprescindible, gracias a su función protectora frente al contagio del COVID 19.

Pero también se han convertido en el mayor enemigo de las personas con discapacidad auditiva.

Las mascarillas no solo no dejan enseñar todo lo que expresamos con nuestro rostro, sino que por lo general, nos dificulta a todos la comunicación.

¿No os ha pasado que si estáis en un grupo, con la mascarilla puesta, no sabéis ni quien es el que habla?

Pues imagínate si tienes discapacidad auditiva, ya que la forma de entender a las personas que no se manejan con la lengua de signos, es leyendo los labios.

De la noche a la mañana las mascarillas han pasado a formar parte de nuestras vidas, a la vez que, de la noche a la mañana, miles de personas se han visto incomunicadas.

Mascarillas transparentes autorizadas por el Gobierno

Una de estas personas es Marcos Lechet. Un joven que que perdío toda su capacidad auditiva a los 5 años y usuario de implante coclear desde los 23.

Desde hace un tiempo, Marcos, ha conseguido llamar la atención de la opinión pública y de las Administraciones sobre el problema del acceso y el carísimo mantenimiento de estos dispositivos.

Hoy en día sigue luchando por los derechs del colectivo para que el dinero no sea un obstáculo para oír con dignidad.

En España, la sordera afecta a más de un millón de personas.

Su última batalla ha sido para conseguir la homologación de mascarillas trasparentes.

Y por fin esa batalla terminó el pasado 18 de febrero, cuando el Gobierno ha anunciado que autoriza mascarillas transperentes

Marcos Lechet se ha convertido en el representante de miles de personas que han sentido que la pandemia les aislaba de su entorno.

Y es que desde que empezamos a utilizar las mascarillas no ha parado de luchar para que se autorizaran unas mascarillas trasparentes, con las mismas características de seguridad que las habituales.

De tal forma que las personas sordas, a parte de estar protegidas, puedan seguir comunicándose y leyendo los labios.

Ahora sólo queda que la sociedad apoyemos a todas las personas con discapacidad auditiva utilizando estas mascarillas.

Para que no tengan problemas a la hora de ir al supermercado, al médico, la farmacia o al taller y puedan seguir comunicaándose como lo hacian hasta ahora.

Desde Somosdisca tan solo podemos decir ¡¡MUCHAS GRACIAS MARCOS!!

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