La pérdida auditiva es un problema que puede afectar a todos los grupos de edad, aunque si que hay que ser conscientes, que incide especialmente sobre los mayores.
Se calcula que el 30% de las personas mayores de 65 años padecen algún trastorno auditivo.
Pero no solo afecta a los mayores, últimamente se ha visto un incremento importante del uso de audífonos en jóvenes.
La Organización Mundial de la Salud señala que actualmente 43 millones de jóvenes entre 12 y 35 años presentan discapacidades auditivas.
Esto se debe a las prácticas inseguras de escucha, como usar dispositivos electrónicos y auriculares reiteradamente, o estar expuesto a 100 decibelios durante más de 15 minutos.
Una vez que las células auditivas se han perdido, no se reemplazan. Por eso se recomienda:
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Bajar el volumen de los dispositivos (y colocarlos a un máximo de un 60% de su capacidad).
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Limitar el tiempo en que nos exponemos a actividades ruidosas.
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Estar atento a los signos de pérdida de audición, como pitidos en los oídos, o detectar dificultades de escucha tras estar expuesto a ruido.
El tiempo de media que tarda una persona en recurrir a un profesional desde que empieza a notar problemas auditivos suele ser de unos siete años.
Hay que tener en cuenta que el uso de audífonos mejora sustancialmente la comunicación, la participación en la vida social, la confianza en uno mismo, el sentido de la independencia y la salud, tanto física como mental.
Por eso es importante que tanto si la perdida auditiva es causada por una discapacidad de nacimiento, como si se adquiere con el tiempo, la persona se decida y se convenza que el audífono le ayudará a tener una mayor calidad de vida en su día a día.
A continuación te doy algunos consejos para el cuidado del día a día de tus audífonos, ya que por desgracia es un dispositivo que requiere de una gran inversión económica.
Y un buen cuidado y mantenimiento hará que alargues su duración y la calidad de su función.
CUIDADOS Y MANTENIMIENTO:
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UTILIZAR UNA FUNDA SOBRE UNA SUPERFICIE FIJA: Para evitar daños en caso de caídas, lo mejor es manipularlos sobre una superficie blanda y cercana. Cuando no se esté usando el audífono, lo ideal es guardarlo de forma segura en su estuche y en esta época del año evitar la exposición directa al sol o lugares muy calurosos como el interior de los vehículos aparcados al sol.
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EVITAR EL AGUA DEL MAR: En el caso de que decidas utilizarlos en la playa, tienes que teneer en cuenta quemel agua del mar puede dejar restos de cristales de sal dentro de los audífonos, incluso aunque no se mojen.
Además, la arena puede bloquear los puertos de los micrófonos y el protector solar puede contener productos químicos que pueden dañar la carcasa del audífono o bloquear las entradas de los micrófonos.
Los expertos de aconsejan limpiarse bien las manos antes de tocar el audífono, quitárselo o ser muy cuidadoso a la hora de aplicar la crema solar y evitar bañarse en la playa con el audífono puesto.
- EVITAR PRODUCTOS QUIMICOS: Con productos químicos me refiero a las lacas, perfumes, o lociones para después del afeitado… que eusamos a diario, ya que pueden dañar los audífonos.
Lo mismo sucede a la hora de usar productos como repelentes para insectos y gotas para los oídos.
En todos estos casos se recomienda no aplicar estos productos con los audífonos puestos y, una vez utilizados, es importante recordar lavarse bien las manos a la hora de volver a colocarlos.
Además, NUNCA se deben limpiar los audífonos con líquidos o disolventes de limpieza.
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AGUA Y SUDOR: Los audífonos actuales son mucho más resistentes que los que se fabricaban hace unos años, por lo que estan preparados para soportar el sudor y la lluvia.
Pero a pesar de todo es conveniente evitar mojar los audífonos o que la humedad penetre en su interior, ya que puede afectar a la batería, por lo que se recomienda abrir el compartimento de las pilas por la noche y dejar que se ventilen.
Otra opción muy recomendable, cuando se utilizan en ambientes húmedos, es utilizar un sistema de secado del audífono.
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