La Polio es una enfermedad muy infecciosa, pero se combate con la vacunación. La enfermedad afecta al sistema neervioso central. 

En su forma aguda causa inflamación en las neuronas motoras de la médula espinal y del cerebro y lleva a la parálisis, atrofia muscular y muy a menudo deformidad. En el peor de los casos puede causar parálisis permanente o la muerte al paralizarse el diafragma.

El síndrome postpolio (PPS por sus siglas en inglés) es una afección que ataca a los supervivientes de la polio. Aproximadamente del 20 al 40% de las personas que se recuperan de la polio pueden desarrollar PPS.

El comienzo del PPS puede ocurrir en cualquier momento de 10 a 40 años después de declararse la infección y puede progresar lentamente durante diez años, produciendo síntomas como fatiga extrema, dolor muscular y atrofia muscular en nuevas fibras musculares así como en aquellas previamente afectadas. 

 

La polio hoy en día tiene vacuna, pero no se empezó a administrar hasta el año 1963, por lo que muchos de los niños nacidos antes de esa época, incluso en los años posteriores se infectaron de polio.

15.000 menores se infectaron de poliomelitis y 2.000 niños murieron en el anonimato.

Después de una vida de lucha, ahora aquellos niños olvidados de la polio sufren síndrome pospolio. Pero a pesar de que han acudido al Congreso de los Diputados para denunciar su situación, los gobiernos que han estado a lo largo de los años les niegan cualquier tipo de reconocimiento o invalidez. 

Hoy en día siguen luchando porque se les reconozca algún tipo de grado de invalidez.

Pin It on Pinterest

Share This