Hola Titánicos, cada 29 de julio se celebra el día mundial de la hepatitis, una inflamación del hígado cuando éste se lesionan o infecta. Descubre como puede afectar a cada persona.

Las hepatitis son un grupo de enfermedades caracterizadas por producir inflamación del hígado.

En el hígado se llevan a cabo numerosas funciones con gran importancia para el correcto funcionamiento del organismo.

Toda la sangre proveniente del estómago y el intestino pasa por el hígado.

Allí, los nutrientes y las drogas (toxinas, medicamentos, etcétera) son transformados en compuestos más fáciles de asimilar o excretar por el organismo.

En este órgano también tiene lugar la síntesis de la bilis, una sustancia que se almacena en la vesícula biliar, y que se libera al duodeno tras la ingesta de alimentos, para facilitar la digestión de las grasas. 

Estas y otras funciones del hígado pueden verse alteradas por la aparición de un proceso inflamatorio que recibe el nombre de hepatitis.

La hepatitis es, por lo tanto, una inflamación del hígado que puede ser debida a diversas causas, aunque generalmente es un virus el responsable de la afección.

Existen diferentes tipos de hepatitis, de forma que algunos tipos de hepatitis solo causan infecciones agudas, mientras que otros, en cambio, pueden causar infecciones tanto agudas como crónicas

¿CUAL EL LA CAUSA DE LA HEPATITIS?

Existen diferentes tipos de hepatitis, con diferentes causas:

  • La hepatitis viral es el tipo más común. Es causada por uno de varios tipos, la hepatitis virica, los virus de la hepatitis A, hepatitis B, hepatitis C, hepatitis D y hepatitis E. 

  • La hepatitis alcohólica es causada por el consumo excesivo de alcohol

  • La hepatitis tóxica puede ser causada por ciertos venenos, productos químicos, medicamentos o suplementos

  • La hepatitis autoinmune es un tipo crónico en el que su sistema inmunitario ataca su hígado. Se desconoce la causa, pero la genética y el entorno pueden influir 

Día mundial contra la hepatitis.

¿Cómo se transmite la hepatitis viral?

Cuando esta inflamación ha aparecido recientemente hablamos de hepatitis aguda y a los procesos que duran más de seis meses les llamamos hepatitis crónicas.

Las hepatitis virales son enfermedades transmisibles, y, por tanto, potencialmente se pueden prevenir.

La transmisión de los virus A y E se produce a través del agua y alimentos contaminados, por lo que una buena higiene en la alimentación y un tratamiento adecuado del agua y los alimentos puede ayudar a prevenir el contagio.

Además, para el virus de la hepatitis A existe una vacuna muy eficaz que ya se está empezando a incluir en los calendarios de vacunación.

Los virus B, C y delta se transmiten por la sangre y por las relaciones sexuales, aunque el virus C es muy poco eficaz en su transmisión por vía sexual.

Los bancos de sangre examinan todas las muestras para descartar la infección por estos virus, por lo que el contagio se ha reducido enormemente en los últimos años.

Existe una vacuna muy eficaz y segura que previene la infección por el virus B y, consiguientemente, la sobre infección por virus delta que sólo ocurre en portadores del virus B.

Esta vacuna está ya incluida en el calendario vacunal. Desgraciadamente no existe todavía vacuna que prevenga la infección por el virus C.

Las hepatitis autoinmunes, de causa desconocida, no pueden prevenirse. 

¿QUIÉN ESTÁ EN RIESGO DE CONTRAER HEPATITIS?

Los riesgos son diferentes para los distintos tipos de hepatitis. Por ejemplo, con la mayoría de los tipos virales, su riesgo es mayor si tiene relaciones sexuales sin protección.

Las personas que beben mucho durante períodos prolongados corren el riesgo de contraer hepatitis alcohólica.

¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS DE LA HEPATITIS?

Algunas personas con hepatitis no presentan síntomas y no saben que están infectadas. Si se presentan síntomas, pueden incluir:

  • Fiebre

  • Fatiga

  • Pérdida de apetito

  • Náusea y/o vómitos

  • Dolor abdominal

  • Orina oscura

  • Heces de color arcilla

  • Dolor en las articulaciones

  • Ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos)

Si tiene una infección aguda, sus síntomas pueden comenzar entre 2 semanas y 6 meses después de haberse infectado. Si tiene una infección crónica, es posible que no tenga síntomas hasta muchos años después.

Día Mundial contra la Hepatitis

¿CUÉ OTROS PROBLEMAS PUEDEN CAUSAR LA HEPATITIS?

La hepatitis crónica puede provocar complicaciones como cirrosis (cicatrización del hígado), insuficiencia hepática y cáncer de hígado. El diagnóstico y el tratamiento temprano de la hepatitis crónica pueden prevenir estas complicaciones.

¿CÓMO SE DIAGNOSTICA LA HEPATITIS?

Para diagnosticar la hepatitis, su profesional de la salud puede:

  • Preguntar sobre sus síntomas y su historia clínica

  • Hacer un examen físico

  • Es probable que le hagan análisis de sangre, incluyendo pruebas de hepatitis viral

  • Puede realizar pruebas de diagnóstico por imágenes, como una ecografía, una tomografía computarizada o una resonancia magnética

  • Es posible que sea necesario realizar una biopsia de hígado para obtener un diagnóstico claro y verificar si hay daño hepático

¿CUALES SON LOS POSIBLES TRATAMIENTOS PARA LA HEPATITIS?

El tratamiento para la hepatitis depende del tipo que tenga y si es aguda o crónica. La hepatitis viral aguda a menudo desaparece por sí sola. Para sentirse mejor, es posible que solo necesite descansar y tomar suficientes líquidos.

Pero en algunos casos puede ser más serio, incluso podría necesitar tratamiento en un hospital.

Hay diferentes medicamentos para tratar los distintos tipos crónicos de hepatitis. Otros posibles tratamientos pueden incluir cirugía y otros procedimientos médicos. Las personas con hepatitis alcohólica deben dejar el alcohol.

Si la hepatitis crónica llega a provocar insuficiencia hepática o cáncer de hígado, es posible que necesite un trasplante de hígado.

¿SE PUEDE PREVENIR LA HEPATITIS?

Hay diferentes formas de prevenir o reducir el riesgo de hepatitis, según el tipo de afección. Por ejemplo, no beber demasiado alcohol puede prevenir la hepatitis alcohólica.

Existen vacunas para prevenir la hepatitis A y B.

Por otro lado, no hay que olvidar que, a día de hoy, la hepatitis autoinmune no se puede prevenir.

Espero que os haya gustado o parecido interesante este artículo, en tal caso no dudéis en compartirlo con otros Titanes que penséis que les puede servir de ayuda, para así poder dar visibilidad a esta enfermedad entre todos y ayudar a más Gente Titánica.

Aunque esta información ha sido revisada y contrastada, el contenido es meramente orientativo y no tiene valor terapéutico ni diagnóstico.

Desde Somosdisca te recomiendo que, ante cualquier duda relacionada con la salud, acudas directamente a un profesional médico del ámbito sanitario que corresponda.

 

Fuente: www.somosdisca.es

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