Los centros de ayuda para personas con discapacidad física son espacios destinados a personas con problemas de movilidad, discapacidad o deterioro de capacidades funcionales que ofrecen a los usuarios apoyo preventivo y actividades rehabilitadoras.

Por norma general, estos centros de ayuda dependen de organismos públicos, por lo que son gratuitos.

Aunque cada centro dispone de sus propias condiciones de inscripción y solicitud de ayudas, en general están dirigidos a usuarios adultos (de entre 16 y 65 años), comparten instalaciones con centros de día, y su ubicación suele ser cercana a residencias para personas con discapacidad.

Los centros de ayuda para personas con discapacidad física disponen de una amplia oferta de recursos materiales y humanos (asistentes, técnicos, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, trabajadores sociales, etc.).

Algo importante tanto a la hora de recibir asistencia médica como de participar en actividades de ocio.

Otras de las labores beneficiosas que cubren estos centros de ayuda para las personas con discapacidad física y para sus familiares son:

• Tratamientos especializados.

• Promoción de aspectos positivos relacionados con la salud y el bienestar.

• Organización y coordinación de programas de actividades de ocio, rehabilitación, cooperación y convivencia.

• Promoción de la autoayuda.

• Apoyo psicosocial.

• Orientación profesional para familiares.

• Servicios de transporte y comedor.

Centros de ayuda CMRF y CAMF: qué son y en qué se diferencian

Los Centros de Recuperación de Personas con Discapacidad Física del Imserso (CRMF) son instituciones cuya función es facilitar la integración personal y laboral de aquellas personas que tienen una discapacidad física y/o sensorial que les impide recibir la atención para su rehabilitación en centros ordinarios.

Debido a que su ámbito de actuación es nacional, a los CMRF pueden acceder todas las personas que acrediten las siguientes situaciones:

• Ser mayor de 16 años y menor de 65 (excepcionalmente podrán inscribirse jóvenes a partir de 14 años si su proceso formativo y personal así lo requiere).

• Disponer de un certificado de discapacidad actualizado.

• Tener nacionalidad española.

• Tener cierta independencia.

• No padecer ninguna enfermedad infecto-contagiosa.

• No necesitar atención continuada en instituciones sanitarias.

• No padecer trastornos mentales graves que puedan alterar la normal convivencia con otros internos del centro de ayuda.

• Mostrar, gracias a un certificado médico y un examen psicológico, posibilidades razonables de rehabilitación y de recuperación a nivel profesional.

• En algunos casos, poseer el nivel de conocimientos educativos necesarios para cursar la formación que se desea llevar a cabo.

Para inscribirse en un CMRF, los interesados deberán rellenar la solicitud correspondiente y disponible en los Centros Base dependientes Provinciales.

En caso de Comunidades Autónomas con gestión transferida, estos formularios estarán disponibles en el organismo designado para esta función.

Los CMRF disponen de un equipo humano formado por médicos, pedagogos, psicólogos, trabajadores sociales, logopedas, expertos en empleo, profesores y fisioterapeutas, por lo que ofrecen asistencia integral a la discapacidad a través de:

• Asistencia médica funcional.

• Apoyo psicológico.

• Formación profesional.

• Servicio residencial.

Además de los CRMF, el IMSERSO gestiona otros centros de ayuda, los llamados CAMF (Centros de Atención para Personas con Discapacidad Física).

La diferencia con los primeros es que los CAMF están pensados para dar servicio a personas que tienen pocas posibilidades razonables de recuperación profesional como consecuencia de la gravedad de su discapacidad.