La atención temprana está dirigida al desarrollo de la población infantil de 0 a 6 años, su familia y su entorno.

El objetivo es prevenir posibles trastornos de desarrollo y atender a los niños y niñas que los padecen o tienen riesgo de padecerlos.

Cuanto antes se empiece a tratar a un niño, tendrá mejor desarrollo y podrá ser tratado  cuanto antes.

Por eso es muy importante que haya cuantas más Unidades de Atención Temprana, y que incluso se extienda en edad.

Ya que muchos padres se encuentran que todas esas ayudas y terapias desaparecen al cumplir 6 años el niño. A esa edad aun se está desarrollando el pequeño y necesita de cuantas mas terapias mejor.

 

Está dirigida a niños y niñas que presentan los siguientes trastornos del desarrollo:

  • Trastornos del desarrollo cognitivo

  • Trastornos del desarrollo del lenguaje

  • Trastornos de la expresión somática

  • Trastornos emocionales

  • Trastornos de la regulación y el comportamiento

  • Trastornos de la relación y la comunicación. 

El pediatra de atención primaria es el encargado de realizar un seguimiento del desarrollo y de evaluar cualquier señal de alerta que observe durante las revisiones. 

En caso necesario, los pacientes serán derivados a un Centro de Atención Temprana. 

Es allí donde se diseñan actividades integrales, que involucran a los profesionales, los menores y sus familias. 

Es importante que las familias estén presentes en las sesiones que reciben los niños y niñas.

De esta forma, fuera de las sesiones, los padres pueden continuar estimulando a su hija o hijo.

 

Las unidades de atención temprana son unidades de valoración, recogidas en el Decreto regulador de la Atención Infantil Temprana que amplía y refuerza la asistencia a los menores de 0 a 6 años con trastornos del desarrollo o riesgo de padecerlos.  

Lo hacen a través de medidas de prevención, detección precoz, diagnóstico, tratamiento y participación de las familias y del entorno social.

Pin It on Pinterest

Share This